Te deseo una muy Feliz Navidad al lado de tu familia y amigos y mi oración es que el próximo año alcances tus metas y poco a poco te acerques a tus sueños. La navidad es el tiempo perfecto para agradecer por lo que Dios nos ha dado, por su inmenso amor al ofrecernos la salvación y compartir con otros de lo mucho que Dios nos da. Pídele al Señor que me dé trabajo suficiente para poder seguir apoyándote, al igual que alguien me apoyó a mí cuando era niña. Comparte tiempo, amor, servicio y lo que tengas en tus manos ahora mismo, porque aunque tu pienses que no es mucho, puede significar mucho para alguien más. Sueña, planifica, ora y trabaja mucho, porque tenemos un Dios que puede hacer más de lo que nos imaginamos (Efesios 3:20). Disfruta los tamales y el ponche, y cómete uno por mí 🙂
¡Gloria a Dios en las alturas, y en la tierra paz entre los hombres (niños y niñas) de buena voluntad!
Recibe un gran abrazo muy grande desde el otro lado del mundo.
La chica del sótano.